Entre la ficción - pero muy cerca de realidad- Ana Teresa Torres, crea a Ulises Zero, quien busca su identidad desde su estado de amnesia, continúa lucha por saber quién es realmente y encontrase así mismo. Nocturama nos lleva por mundos casi reales.
La amnesia parcial, es un síntoma en el cual no sabes de dónde vienes, ni quién eres, ni para dónde vas, es un estado mental, por fortuna transitorio, el hecho de no saber quien es uno debe ser estresante, así se ve Ulises Zero el personaje principal de la novela escrita por Ana Teresa Torres, en el año 2006. En medio de la ficción y la realidad - casi que pasada hace poco en un sitio de nuestra ciudad - se desarrolla el entretejido de esta novela.
EL COMIENZO.
La historia de Ulises Zero se desarrolla desde que despierta por accidente --provocado por el ruido emitido por la caída del aspa del ventilador- y se ve en una ciudad perdida que no reconoce como se llama. Sólo tiene referencia de los hechos violentos que ocurren con los diversos personajes en el boulevard que se suceden día a día, éste último ubicado en cualquier ciudad moderna en donde las estructuras y moles de cemento oprimen el alma y a sus habitantes. Ulises Zero está siempre - como su nombre- en cero, no sabe nada. Solo tiene la esperanza de conseguir al Dr. Díaz-Grey, quien es el que lo puede regresar a su identidad real.
LA FICCION
Ana Teresa Torres logra con su novela llevarnos por un mundo recreado en fantasías y quizá, realidades para muchos. Porque el mundo que se describe en ella, no es muy lejano de ciertas realidades -que en muchos espacios de la gran ciudad perdida se suceden a diario- sin querer decir que sean exactamente iguales. Son similitudes qué se acercan mucho a realidades, que aunque nos duelan hay que reconocer suceden en nuestra ciudad, por cierto, no perdida.
LA HISTORIA.
La narración hecha por Aspern, personaje que relata los ires y venires de Ulises Zero, en el entorno de una mesa de juego en sus encuentros de los viernes en la tarde con sus contertulios, el Dr. Wakefield, su esposa Emma y el coronel Dickinson - quienes en vano esperan la presencia de Ulises Zero - en una de esas tardes del quinto día de la semana.
En su deambular se radica en la habitación # 32 del hotel Oasis, donde conoce a Walter – el recepcionista del hotel, quien se convierte en su cuidador y preservador de su patrimonio - después de su tortuoso recorrido por el conocido boulevard, porque no puede ubicar la suite que poseía en las residencias Urbex. Producto de su estado provocado - según la policía - por el suministro del papelito que contaminaba a través de la piel y luego le aplicaban una dosis de benzodiacepina, que atonta a las víctimas, provocándoles finalmente estados de amnesia. Todo ello nos conduce al momento donde se encuentra con su anhelada suite, pero con suerte adversa porque también debe abandonarla y continuar con su interminable busqueda en compañía de Eudora Welty, la mujer que lo acompaña en su trasegar hasta el final de su relato.
Ana Teresa Torres, nos lleva con su novela - a través del mundo de la ficción- pero muy cercana de la realidad. La ciudad de Nocturama, no posee historia propia, por lo que sus habitantes construyen su propia historia, a partir de la unión de acontecimientos de la historia universal. Nocturama, ciudad en donde los conejos y la lechuga son los productos que permiten su supervivencia, puede quedar en cualquier lugar del mundo, pero se parece tanto a nuestra querida ciudad.
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